Hoy quien más ,quien menos, estamos embarcados en la tarea de cooperar porque sabemos que podemos destruirnos. Si es tan cierto que el miedo paraliza, emociones como la impotencia , la rabia, el odio pueden colapsar a una persona hasta que estalla, y lo hace dañando a veces lo que más quiere o necesita. Sobre alguien que tal vez no sea el que originó la impotencia.
Una manera de gestionar uno mismo esas emociones de rabia, odio, ira, impotencia y no sentirse tan lleno de ellas , hasta creerse un mal bicho , venenoso, e irrecuperable , es practicar unas 7 veces ,en días no muy distantes entre si, (como para que el inconciente lo asimile) ,este ejercicio muy sencillo que hace tiempo aprendí de una colega y ahora les entrego...
1º- Escribir una media carilla, poniendo palabras a la emoción, tal cual sale, en caliente , suelte todo.
No importa lo que allí suelte, porque sólo lo leerá usted. Guarda después el papel, donde nadie lo vea, esto es muy importante, porque su "inconciente" , lo que es igual a usted, actuando como un/a inconciente...desde algún "yo" muy escondido de usted mismo/a, puede hacer que lo deje "olvidado"justo allí donde otro lo pueda ver y enterarse que usted quería asesinar al vecino por cortarle las flores de su jardín ...por ej.
Y luego explicarle al otro que sólo era un ejercicio... para usted es un trabajo de más.
A usted le sirve ver cómo hace con la rabia que siente cada vez que sale a la calle y encuentra las flores pisoteadas o arrancadas por la pelota del niño del vecino.
Esta primera parte del "ejercicio" sólo tiene el sentido de pura descarga emocional.
2º- Vuelve a leer , pasadas unas horas ese papel.
Allí verá que lo de asesinar al vecino era exagerado, pero su rabia con las flores destrozadas , es lícita en si. En esa lectura "en frío" usted puede ver más objetivamente. Usted extrae aquello que, si, tiene sentido. Por ejemplo cuidar su jardín y natural rabia por verlo destruído.
3º- Con esa rabia , la real. Anota abajo de la catarata emocional.
QUÉ DECIDO HACER CON ESTO?
Lo que decida , ha de ser
a- Posible , para usted. Comenzar por lo que le resulte más sencillo.
b- Que lo que decida, no implique hacerse daño, ni a usted ni a nadie.
c- Que sea lo mejor a largo plazo...
4º- HACERLO , lo que decidió.
Es en la práctica (esto es muy importante) cuando usted se sentirá realmente bien. Cuando a esa furia en bruto, la vió, la desmenuzó ,reflexionó, y transformó en algo útil, para usted y para el otro. Puede haber muchas formas distintas de arreglar una misma situación si hay ganas, por parte de los implicados.
Procesos como éste ,por ejemplo, era a lo que los antiguos alquimistas llamaban "transformar el plomo en oro", hoy las palabras y los medios han cambiado, pero el sentido es exactamente el mismo.
Y porqué hacerlo unas 7 veces?
porque primero hay que hacer que el inconciente lo integre como hábito, así se doma la fuerza en bruto. Compartimos emociones con el mundo animal. Pero nos hemos dado a través del tiempo la posibilidad de domar y encauzar los mismos instintos que siendo necesarios, hay que "reconocer" y luego "sublimar"...de otra manera vamos arrastrando las broncas , las impotencias, envidias etc, de una relación a otra siendo nosotros mismos los que impedimos que nuestro huerto crezca sano.
Con la repetición, luego de varias veces, nos encontramos con que, ante una "injusticia" por ejemplo, ya nos sale de dentro decirlo mejor, sin venganza ni amenaza y sin dañar y que sea lo mejor a largo plazo para todos.
Está claro que también depende de las ganas del otro de escuchar, de su aceptación o no y suponiendo que lo reconozca, de la flexibilidad para cambiar que tenga la otra persona.
Al menos, usted, tendrá claro que puso de manifiesto el obstáculo, hizo lo posible de su parte para llegar a un acuerdo. Y en adelante no seguirá ahogándose en su impotencia, o rabia, usará su propia fuerza vital en situaciones donde en vez de llevar la ira de un lado a otro, usted pueda cuidar "las flores que decida plantar".
Lo que no sirve ...
al hacer esto, es que usted ,en vez de soltar la rabia en unos cuantos renglones,
escriba y se apoltrone en su amargura, varias carillas, como si fuera un ensayo donde usted registra de forma masoquista todas las penurias que vivió desde chiquito/a. Porque de esa manera se autoenvenena rumiando obsesivamente , se lo cree, y se refuerza el creerse una víctima, que seguramente no fue siempre.
Aquí sirve tomar lo "puntual", caso por caso, situación por situación a resolver y ocuparse de una cosa por vez. Así si, podrá cambiar su ánimo y su cara cuando se mire al espejo ,además de sentirse mejor en sus relaciones .
